sábado, 5 de mayo de 2018

DEL PREGÓN DE LAS GLORIAS DE 2018

Y bajando por Sales y Ferré para encaminarse a la calle Dormitorio, retornando desde ésta parsimoniosamente a San Ildefonso, el apóstol San Mateo, en nombre de los Reyes que han sido, que son y que serán, viene marcando el camino al frente de una tumbilla que cobija un fernandino perfil cuya galanura continúa inspirando a los sastres que se reúnen gremialmente en torno a su Ama y Señora.

Son ocho siglos, tal vez, 
los que guarda en su quimera
esa mirada certera 
que muestra, sin lobreguez,
la sublime candidez 
de una reina soberana 
cuya piel de porcelana 
se conserva igual que ayer
mientras cose en su taller
encajes de filigrana.

Entre hilos y alfileres, 
Ella ejerce la costura 
con innegable soltura,
realizando sus quehaceres
en lentos atardeceres 
en los que el cielo ambiciona
el oro de su corona 
al refulgir los quilates 
que dieron los alfayates
para su regia patrona.



No hay comentarios: